Chetumal sale a las calles a exigir justicia por Dulce Yarely Flores

En una emotiva y enérgica manifestación, ciudadanos de Chetumal salieron a las calles hoy para exigir justicia por Dulce Yarely Flores, una joven enfermera cuyo cuerpo fue encontrado sin vida hace apenas unas horas. La tragedia ha conmocionado a la comunidad y ha desatado una ola de indignación, pues la muerte de Dulce no solo representa una pérdida irreparable para su familia, sino que también pone en evidencia la creciente crisis de seguridad en la región.

El caso de Dulce Yarely Flores ha sacudido profundamente a la sociedad de Chetumal, pero su muerte es solo la punta del iceberg de un problema aún más alarmante: la desaparición de al menos 52 personas más en el estado. Según trascendió, no se han realizado búsquedas exhaustivas ni se han mostrado signos de voluntad por parte de la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (FGEQROO) para encontrar a los desaparecidos, lo que ha generado un clima de desesperación y desconfianza entre las familias afectadas.

Los manifestantes, portando pancartas con mensajes de protesta y fotografías de sus seres queridos desaparecidos, recorrieron las principales avenidas de la ciudad clamando por justicia y pidiendo la intervención inmediata de las autoridades. “¡No están solos! ¡Exigimos justicia para Dulce y para todos los desaparecidos!” coreaban mientras avanzaban hacia el Palacio de Gobierno
.

La falta de acción por parte del gobierno estatal ha sido severamente criticada, con los manifestantes denunciando la indiferencia y la ineficiencia de las autoridades. “Estamos aquí porque ya no podemos quedarnos callados mientras nuestras familias desaparecen y el gobierno mira hacia otro lado,” declaró uno de los organizadores de la marcha.

La situación en Quintana Roo es alarmante, y la muerte de Dulce Yarely Flores podría ser un trágico recordatorio de la urgencia de abordar la crisis de desapariciones en el estado. Las familias de los desaparecidos claman por respuestas, justicia y, sobre todo, por la seguridad que el gobierno parece haberles negado.

El llamado es claro: se necesita acción inmediata para encontrar a las personas desaparecidas y evitar que más familias vivan la agonía de la incertidumbre y el dolor

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